Este fin de semana lo he pasado en Castro Urdiales, relajandome un rato, y dando algun que otro paseo por el pueblo con mi venerable Hexagon 125, que ha sustituido a la Sfera (ahora una maquina de competicion pura y dura) como moto para moverme por ahi y hacer pequeñas escapadas.
En lo alto de un monte, hay una pequeña ermita,aqui mas conocida como "la Virgen" a la cual se accede por un camino de cabras, apto para todo terrenos o similares, aunque lo idoneo es subir a pie...y es una larga subida. Desde ahi se tiene una explendida vista de Castro y de algunos pueblos cercanos.
Hacia años que no subia, la ultima vez lo hice con la Sfera 50, tuve que dejarla enfriar cuando llegue arriba, pero cumplio muy dignamente.
Asi que como tenia tiempo de sobra y nada que hacer, me dije "voy a subir a la ermita" pero esta vez con el Hexagon y su refrigeracion liquida, asi que sin problemas, si subi con la Sfera...
Y ahi fui, comence a introducirme por las estrechas carreteras que llevan al acceso a la subida, y me meti en el desvio, para que os hagais una idea es un camino de tierra sobre el que han echado cemento...a trozos.
Un pequeño cartel roñoso indica el camino, bueno, comenzamos el ascenso, el Hexagon sube tranquilamente, traqueteando algo y con el caballete dando algun golpe, pero sin mas novedad.
Subo y subo, y en esto que el camino se bifurca...hummm, empiezo a adentrarme por el camino de la derecha...es muy llano, esto deberia subir, asi que me doy media vuelta y sigo por el de la izquierda, que efectivamente, sube...y de que manera.
Al de poco tiempo comienzan a aparecer rodadas bastante profundas, con huellas de vehiculos oruga, el cemento hace tiempo que ha desaparecido, la temperatura del hexagon sube hasta casi los 80º,no es preocupante, pero significa que esto no es facil.
A medida que voy subiendo, creo recordar que el camino no era TAN largo...empiezo a tener mis sospechas de haber errado el camino, pero bueno, por seguir un poco...menos mal que llene el deposito antes.
Pocos centenares de metros despues...sustito, en una curva, baja un Mitsubishi pajero, perdon, Montero, con un remolque con ¿vacas? pasamos como podemos, el tio me mira con extrañeza (¿que hace "eso" aqui?) y sigo mi camino...hasta encontrarme con unos cuernos adosados a una vaca que me mira con cariño, menos mal que el hexagon es verde...
Y seeeeguiiimooos subiendo...ya bastante mosca, apartando ramas con la pantalla, recibiendo arañazos, veo que estoy llegando a la cima del monte, algo chamuscado y talado...tampoco recordaba asi los aledaños de la ermita...y al final del camino, ya con la lengua fuera, una verja. ¿Ein?
Y tras la verja...¡dos avestruces! ¿Comorrlll? Joder si me he ido lejos, debo de estar en el Kilimanjaro al menos...
Saco el movil y las hago algunas fotos, miro a mi derecha y veo la ermita...desde arriba, a bastante distancia, en un monte muuucho mas bajo que en el que estoy...
Ejem.
Bueno, pues media vuelta y a bajar, otro dia sera.
Y por supuesto, me perdi tambien bajando.
Dicen que subir es mas dificil que bajar...no siempre, al menos no si quieres bajar de una forma ortodoxa, es decir, tu sobre la moto y no dando vueltas con ella.
Me han comentado que las huellas de vehiculo oruga (carrocetas de madera en este caso) son infernales para las BTT, bien, ahora id sobre ellas con un escuter de 140Kg, tamaño grande y ruedas de 10" ¿A que mola?
Tras varias derrapadas de tren delantero, ir rebotando , y varios pisotones al suelo, me voy haciendo con el sistema para ir bajando...con el motor parado, ya que un 2T automatico sin retencion, pues tanto me da...
Piedras sueltas, ramas, que hacen girar la direccion bruscamente, ramas que me arañan entero, patadas salvadoras al suelo que impiden que sea descabalgado, botes y mas botes, que hacen que en un pequeño tramo llano la moto no arranque porque se habia descebado el carburador...tras un par de acelerones, ya arranco bien, y bastante enfriada.
Como no tenia ni pajolera idea de donde estaba, cualquier camino que bajase me iba bien, asi que escogia el que menos jodido me parecia a primera vista, aunque luego me da a mi que eran todos iguales...en las fotos no se aprecia la pendiente que habia, ni de lejos.
finalmente, tras un buen, pero que muy buen rato de bajada, vi la luz, en forma de troncos apilados y una carretera de ¡oh asfalto, mi tesssoooroooo! que me devolvia a la civilizacion
Y de ahi a casa, con las manos descojonadas de sujetar el manillar, de accionar los frenos, y las piernas doloridas de tanto patear el suelo para levantar la moto.
Los escuters solo para ciudad...¡Ja!
Vs