Unas fotos espectaculares y una envidia de viaje para los que con una 125 están vedados.
Llama la atención lo bien preparada que llevas la X.
Buena maquina, mejor compañia (la de tu contramaestre), alforjas llenas y una carretera para disfrutar. Joder, que envidia, (de la buena, si es que existe) para los pobres aficionados de la 125.
Un abrazo.